lunes, 10 de agosto de 2009

ANTOLOGÍA DE POÉTICAS DE ANTOLOGÍA ( IV )

Cuatro verbos considero que son la base de mi poesía: leer todo lo que esté al alcance, aprender de los grandes maestros y por supuesto imitarlos, y por último, originar, intentando poner el máximo del subconsciente que es donde reside la verdadera didáctica.

Diego Medina Poveda en Frontera Sur. (Diputación de Málaga, Colección Puerta del Mar, 2007).


Poética del paseo
El caminante hace camino al andar. Por todos los sitios transita. El caminante cuando ve una rueda dice ver también surrealismo. Nunca estuvo en París pero yo lo vi beberse Alcoholes, escribir por los andenes del rumor del Sena y la uva vendimiada a una mendiga de cabellos rojos o a una que pasa y que como aquel poeta desde el Mirabeau acariciar quiso el vacío. Dice el caminante encontrar siempre en París una película distinta. Nunca nada es igual si se ha leído. Las calles son escenas, historias, planos cortos, la Seberg en el espejo o una teta de BB bajo la sábana... El caminante piensa que la poesía es un camino, y que el camino es también poesía. Dice, recordando a Kostro, que quien inventó la rueda fue un poeta. El poeta es un ingeniero de caminos y ficciones, y el caminante al final de la escapada se detiene: el poeta también.

Diego Medina Poveda en Urbana Babel. (Ayto. de Málaga, Colección Monosabio, 2009).

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